martes, 18 de diciembre de 2012

MANIFIESTO EN EL DÍA CONTRA LA VIOLENCIA DE GÉNERO

MANIFIESTO EN EL DÍA CONTRA LA VIOLENCIA DE GÉNERO
Buenos días a todos. Hoy estamos aquí para conmemorar el Día contra la violencia de género. Antes de nada vamos a dar  la bienvenida a los alumnos y el profesorado que participan con nuestro centro en el proyecto ARCE: el instituto Bellavista de Andalucía y el instituto                            Santa Teresa de Jesús de Madrid. Esperamos que les esté gustando su visita a nuestra isla.
Hoy nos acompañan estas alumnas, de todas las edades, que han querido estar aquí maquilladas, representando a las mujeres que sufren en silencio los horrores de la violencia. También nosotros, los alumnos de Primero de la ESO hemos estado reflexionando y trabajando el tema de los malostratos hacia la mujer. Teníamos tanto que decir que, de entre las ideas aportadas por todos, hemos redactado este manifiesto que pretende poner un granito de arena en la lucha contra la violencia machista, sea del tipo que sea. Y por eso pensamos que hay que parar: todos podemos hacer algo. Sabemos que:

·       No queremos una casa donde la madre sea un objeto.
·       Queremos una mujer valiente, libre, que vista como quiera y que salga cuando le apetezca.
·       No queremos una casa donde el padre sea la mano dura.
·       Queremos que en casa se pueda dialogar y que no haya miedos.
·       No queremos unos padres que se insulten ni  que durante la comida haya golpes en la mesa.
·       Queremos que las mujeres que nos rodean no se vean amenazadas dentro de su propio hogar.
·       Rechazamos la cobardía, la brutalidad y la intolerancia de quienes abusan de las mujeres de su vida.

Y para ello vamos a decirles, a esas mujeres, que no hay que mirar atrás porque si lo hacen no habrá ningún futuro. Hay que parar, quitar las telarañas de la vida y seguir adelante.
Y no olvidar que todos podemos ayudar. ¿Cómo? Debemos denunciar el maltrato, que se manifiesta en forma de insultos, agresiones, órdenes, desprecios, prohibiciones, intolerancia hacia las ideas y las opiniones de nuestras madres, hermanas, amigas… Porque estas mujeres que sufren pueden estar a nuestro lado y no las vemos. Abramos los ojos ante una realidad que no tiene edad.
Vamos a animar a las mujeres de nuestra vida a que se quieran a sí mismas, a que sean fuertes, valientes, y sobre todo, felices.
Todos unidos podemos hacer un mundo mejor.
Y para que durante todo el año recordemos esta realidad, hoy vamos a inaugurar en nuestro instituto una escultura, que podemos contemplar a la entrada del centro, realizada por los alumnos de Plástica de 1º A,F, 3ºF,G  y 4º C,D  . Raíces de esperanza es una obra dedicada a las mujeres que  más allá de la violencia perciben la esperanza de una vida diferente, mejor.
Gracias a todos.