Con la llegada del fin de curso, es hora de revisar y evaluar el desarrollo de esta actividad complementaria en el recreo. Un año más gracias a la participación del alumnado se ha podido llevar a la práctica la competición deportiva con un grado de participación similar al de otros años respondiendo a los intereses del alumnado. Basta echar un vistazo al patio cualquier día de la semana en el tiempo de recreo; las canchas se siguen ocupando con alumnos, que aún desafiando el estado en el que se encuentran, continúan haciendo deporte. Afortunadamente parece que este problema está en vías de solución, y muy seguro que esto va a redundar en mejorar la realización de esta actividad que se ha estado repitiendo año tras año desde hace ya bastante tiempo. Desde el departamento de educación física seguimos defendiendo el desempeño de esta práctica porque creemos que este rato de ocio y descanso académico aporta muchos beneficios tanto para el alumnado como para el centro.
Sería bueno repasar algunos datos que nos deja el análisis de la actividad durante este año. La actividad contó con el apoyo de 183 alumnos que han participado de manera activa en la competición. La liga interna es una actividad complementaria de continuación que se ha extendido durante 22 semanas de competición real, desde su inicio el 29 de octubre, como fecha de arranque de la competición, hasta la fecha de cierre, el día 19 de abril del año en curso. Se han materializado 83 partidos oficiales de 5 actividades físico-deportivas como son el fútbol-sala, baloncesto 3*3, el tenis de mesa, bádminton y el brilé.
La organización de este evento tan complejo necesita de la colaboración del alumnado como el profesorado para la buena marcha de éste. Algunas cuestiones creemos que han sido acertadas y que deben ser mantenidas o incorporadas para años posteriores. Por ejemplo, entre otras, además de la implicación y participación en el desarrollo de la competición, destacamos el apoyo informativo y publicitario a partir de la revista del centro y vicedirección con proyecciones y publicaciones relativas a las competiciones, nuevas formas de organización de la competición, como concentraciones previas al desarrollo del calendario deportivo, y finalmente novedosas formas de estimular a los participantes como la proyección de fotografías de los equipos en el hall del centro, además de mantener la entrega de medallas y recuerdos como modo de reconocimiento a la participación en la actividad.
Ahora bien, partiendo del hecho de que todo es mejorable, indicamos a continuación una serie de propuestas para superar los desajustes que se han producido durante la realización de la liga interna este año: a) recuperar la figura de la comisión de alumnos para el control de las competiciones; b) estimular la creación de un delegado de deportes dentro de la revista que se encargue de hacer conocer a sus compañeros el desarrollo de la liga; c) Potenciar y promocionar la participación femenina en las competiciones; d) Estimular y premiar la labor arbitral en los partidos; e) Promoción de incluir en la liga otros deportes (voleibol y balonmano) y juegos tradicionales (bola canaria).
En resumen, esperamos volver a competir el próximo año, mejorando lo realizado, sin olvidar el juego limpio y el espíritu de esfuerzo y de equipo, pilares fundamentales en el ejercicio físico-deportivo.
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